Ellos hablaron de un supuesto linchamiento mediático en contra del Segundo Mandatario. «No se le permite el derecho a la defensa y se lo ha sentenciado ya en los medios de comunicación», dijo Buendía.
«Nos preocupa el linchamiento mediático del que ha sido víctima», agregó Espín, al tiempo que pidió que su juzgamiento se lleve dentro del marco de la Justicia. Las declaraciones se registraron un día después de que un delator de Odebrecht señalara a Glas, como parte de una trama de supuesta corrupción.
Aguiñaga, por su parte, cree que hay presiones políticas en contra de las autoridades de control, en especial de la Fiscalía. Exhortó a las autoridades a que actúen en el marco de la ley, «sin presión alguna». Y pidió a los demás actores políticos que «dejen actuar a la justicia».
El legislador Cárdenas indicó que el Vicepresidente fue elegido por votación popular para este periodo, por lo que no tiene por qué renunciar. Además todos concordaron en que, el hecho de que siga en funciones, aunque no las tenga, no implica ninguna presión política para las autoridades que lo investigan.
Fuente: El Comercio