Las llamas consumieron 11 hectáreas de páramo de pajonal y polylepis, cabe indicar que 6 hectáreas se encontraban dentro del área protegida del Parque Nacional Llanganates.
En primera instancia, las condiciones climáticas hicieron que el incendio no sea controlado rápidamente, sin embargo, el esfuerzo de los guardaparques y demás personal hizo que este sea aplacado al cabo de unas horas de intenso trabajo.
El Ministerio del Ambiente se mantiene vigilante ante cualquier eventualidad que pueda afectar la conservación de las áreas protegidas, por ello, recomienda a los ciudadanos que tomen las precauciones del caso cuando visiten una zona frágil y más aún en esta temporada donde la presencia de lluvias es nula y por el contrario las intensas radiaciones solares acompañadas de fuertes vientos, hace que la mínima chispa de fuego pueda ser la causa de un incendio de grandes proporciones.