El gerente del BCE, Diego Martínez, aclaró que los únicos que salen de circulación y que ya no se van a poder aceptar son los billetes que estén parchados con exceso de cinta adhesiva, “en los que exista tanta cinta en la que ya no se pueda reconocer la denominación del billete”
El resto de billetes, los que estén incluso rotos y rayados, pero que conserven más del 50% de la superficie seguirán circulando. La autoridad financiera explicó, sin embargo, que si los ciudadanos desean cambiarlos por billetes nuevo pueden acercarse a las oficinas del Banco Central o a cualquier entidad financiera.
Mientras tanto, se iniciará una campañas de información para promover el cuidado de los billetes y el uso de mecanismos virtuales como tarjeta de crédito o débito, el dinero electrónico o las transacciones vía internet.
Martínez recordó que al manejar dinero electrónico, los ciudadanos acceden a la devolución de cuatro puntos del Impuesto al Valor Agregado (IVA). “La utilización de estos medios no solamente que cuida nuestros billetes sino genera un ingreso adicional, mayor seguridad, eficiencia y evitar falsificaciones», sostuvo.
La vida útil de un billete en Estados Unidos es de entre 5 y 7 años, en Ecuador el mismo billete dura menos de 2 años, dijo el gerente del Banco Central, por ello recomendó no sellarlos, graparlos, escribir sobre ellos.