El fallo se estableció la semana pasada en la jurisdicción norte de Lima, donde el acoso sexual y el chantaje efectuado por meses por Álex Álvarez Silvera, de 20 años, contra su expareja, de 16 años, fueron sancionados con cuatro años y ocho meses de prisión efectiva, una reparación civil de USD 1,470 y la orden de que el condenado «reciba una terapia psicológica a fin de asegurar su reinserción en la sociedad».
La magistrada Ynés Barrón, del 11º Juzgado Penal Unipersonal de la Corte Superior de Justicia de Lima Norte, en la audiencia en que el acusado no estuvo presente ni de momento ha sido localizado por la policía. «La figura era que un joven, que había sido enamorado de esta adolescente y con quien se había terminado la relación, insistía para volver con ella aún cuando ella ya no quería, pero él no entendía eso.
Seguía buscándola, la vigilaba y trataba de establecer contacto con ella a través del chantaje», refirió la jueza Barrón. «Te mataré y seré así el asesino que tanto quiero ser«, fue uno de los mensajes que llegaron al celular de la adolescente que temió por su vida y primero denunció los hechos con su madre y posteriormente ante la Policía.
Todos estos medios probatorios -reunidos por el Ministerio Público- además de las propias declaraciones del acusado, de la agraviada y de la madre de esta, fueron claves para que la menor acceda a la Justicia y se llegue a determinar la pena privativa de la libertad para el acusado.
Pruebas que, según explicó la abogada Clea Guerra de la ONG feminista Flora Tristán, «no siempre existen en las situaciones de acoso sexual, por lo que es la mayor dificultad para que las víctimas encuentren justicia, además de la normalización de este tipo de violencia en la sociedad».
Es una alarmante realidad peruana, donde las cifras «Hay que tener en consideración que va a haber casos en los que estas pruebas adicionales no van a existir y que la prueba fundamental es la declaración de la víctima», agregó la abogada.
Según la Policía Nacional, cada día en Perú 10 adolescentes entre los 12 y 17 años de edad son víctimas de violación sexual, y el año pasado sus denuncias alcanzaron los 3,767 casos; en tanto que en el 2018 se contabilizaron 149 casos de feminicidios.
Fuente: EFE – Aliado estratégico FmMundo