De acuerdo con un comunicado de la Casa Rosada, sede del Ejecutivo, el grupo lanzó piedras al auto, provocando la rotura de dos vidrios de la unidad.
«La agenda del Jefe de Estado continúa en forma normal», agregó el texto. En una breve pausa de sus vacaciones, el mandatario dejó abierto el Centro de Interpretación e información turística de Villa Traful, desde donde dijo a los argentinos que fue un año duro pero se mostró optimista y expresó que en 2017 ‘vamos a crecer’.
Es la segunda vez en el año que atacan el auto en el que viajaba el presidente. La primera fue en Mar del Plata, en agosto pasado, cuando un grupo de manifestantes de la organización Votamos Luchar pateó y le tiró piedras al vehículo.