La convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad nació de una necesidad conjunta de las organizaciones no gubernamentales, sociedad civil y los estados que requerían un marco universal sobre el cual trabajar en políticas públicas inclusivas para las personas con discapacidad. El 13 de diciembre de 2006 se suscribe la convención y se convierte en el primer instrumento que reafirma los derechos de igualdad y equidad para las personas con discapacidad.
Desde entonces, se planteó como eje de acción el cambio de concepto de la discapacidad, que pase de una preocupación en materia de bienestar social a un tema de derechos humanos en el sistema de Naciones Unidas.
Esta convención cuenta con un conjunto de Estados que son parte, un Comité de expertos que revisa los avances e implementación y una relatoría para evaluar y realizar recomendaciones a cada Estado miembro.
Lenín Moreno, desde su incorporación como Enviado Especial ha trabajado durante los dos años de su gestión en promover la firma, la ratificación universal y la implementación de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y su Protocolo Facultativo.
Moreno ha trabajado con todos los países miembros del sistema de Naciones Unidas, no solo para lograr más adeptos sino para impulsar, con quienes ya son parte los beneficios de ratificar la convención. Son cerca de mil millones de personas con discapacidad en el mundo para las cuales se trabaja en lograr que tengan una mejor calidad de vida, donde sus derechos sean respetados en igualdad de condiciones y puedan llevar adelante sus actividades cotidianas como miembros de la sociedad.
El enfoque de este año de la COSP9 será “Implementación de la agenda de desarrollo 2030 para todas las personas con discpacidad, no dejar a nadie atrás”.
Lenín Moreno participará en los diálogos con los Estados miembros y hará un informe de las acciones dirigidas a la implementación de la Convención Sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.