En cadena nacional, acompañado del Vicepresidente Otto Sonnenholzner y del alto mando militar, el presidente de la República, Lenín Moreno, anunció que se trasladó a Guayaquil para gobernar desde esa ciudad, apegado a las atribuciones que le permiten la Constitución y las leyes.
«He trasladado la sede de Gobierno a esta querida ciudad, de acuerdo a las atribuciones constitucionales que me competen», dijo el Primer Mandatario al asegurar que la jornada de movilizaciones que vive el país desde el pasado jueves 3 de octubre de 2019, «no es una manifestación de descontento, sino que los saqueos, el vandalismo y la violencia demuestran que hay la intención de romper el orden democrático del país«.
«Los más violentos son individuos externos, pagados y organizados. ¿Es coincidencia que Rafael Correa, Ricardo Patiño y Paola Pabón hayan viajado hace unas semanas a Venezuela? Se preguntó el Jefe de Estado para quien, ellos junto con el Presidente venezolano, Nicolás Maduro son los que están detrás de este intento de golpe de Estado«.
El Mandatario agradeció «el compromiso» demostrado por las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional frente a las manifestaciones y protestas violentas.
«Desde el Gobierno vamos a seguir protegiendo la integridad de los ciudadanos (…) La violencia y el caos no van a ganar», aseguró. «No voy a dar marcha atrás porque lo correcto no tiene matices (…) La eliminación del subsidio a los combustibles es una decisión histórica. Asegura que nuestra economía esté sana y la dolarización, protegida», agregó en su alocución.
Moreno hizo un llamado a los sectores sociales al diálogo fraterno y sincero, una puerta que dijo, que desde el Gobierno jamás se cerró.