Cuando asumió como Presidente de la República el 24 de mayo de 2017, Lenín Moreno se encontró con una sociedad enfrentada a todo nivel, dividida e intolerante.
Eso además de las decenas de casos de corrupción de altos funcionarios del gobierno anterior y que habrían provocado un perjuicio al Estado de $ 70 mil millones.
Al cumplirse dos años de gestión, Moreno vuelve a enfatizar la importancia del diálogo para encontrar entre todos los sectores que integran la sociedad ecuatoriana, las soluciones a los problemas que enfrenta el país, y encaminarlo hacia un futuro de progreso.
El pasado 5 de mayo arrancó la segunda etapa del diálogo denominado “Acuerdo Nacional Ecuador 2030”, que estará coordinado por el vicepresidente Otto Sonnenholzner. Esta vocación del Mandatario empezó apenas asumió la presidencia, para lo cual, el 20 de junio de 2017, institucionalizó el diálogo nacional con la firma del Decreto 49, encaminado a que las instituciones del Estado promuevan la participación ciudadana.
Conforme pasaron los días, el acercamiento a los actores políticos se acentuó más y el Mandatario recibió en Carondelet a sus excontrincantes de campaña: Abdalá Bucaram Pulley, Cynthia Viteri y Paco Moncayo.
Además, se reunió con el líder del Partido Social Cristiano y entonces alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, y Marcelo Cabrera, quien ejercía la alcaldía de Cuenca. Así mismo, llegaron los dirigentes de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie).
Fuente: El Telégrafo, nota original: LINK