Las autoridades de Carchi exhortan a la ciudadanía para que no salgan de casa, más aún cuando los epidemiólogos que hacen el seguimiento a la pandemia han advertido que en estas dos próximas semanas la curva de contagios alcanzaría su mayor techo.
“No es menos cierto que Carchi es la provincia con menos contagios, pero si nos relajamos, incumplimos los protocolos y deambulamos por las calles de la ciudad esta realidad puede cambiar”, manifestó el coronel Luis Chica, comandante de la Subzona de Policía de Carchi.
El pasado 22 de junio Carchi registraba 232 casos de coronavirus, 21 días después, al 13 de julio existen 460; es decir, se duplicó el número de infectados que se recuperan en los cercos epidemiológicos. A su vez, Tulcán, principal cantón de la provincia, pasó de 151 a 292 infectados en ese mismo periodo.
El cambio al semáforo amarillo provocó un aumento de casos de COVID-19 en Tulcán, motivando la preocupación en las autoridades por la relajación de la ciudadanía y el incumplimiento de las medidas de bioseguridad.
Entre el 4 de mayo y 7 de julio, han sancionado a 1785 personas por no usar mascarillas o mal uso de estos elementos, incumpliento que es sancionado por ordenanza municipal.
Chica indicó que frente al alarmante crecimiento del número de casos vienen coordinando acciones con distintas instituciones para que los ciudadanos respeten el distanciamiento social y el uso de mascarillas.
En cambio que los buses de transporte público urbano en las denominadas ‘horas pico’ estarían circulando totalmente llenos, desacatando los protocolos y medidas de bioseguridad y sin cumplir el apartamiento entre los usuarios.
Sanciones
Han sido clausurados 17 locales por la Intendencia por no cumplir los protocolos y 489 establecimientos cerrados porque no estaban autorizados. También fueron retenidos 543 vehículos por incumplir el pico y placa, y 597 ciudadanos sancionados por no respetar el toque de queda.
Durante los operativos de control y seguridad han sido requisadas 409 armas blancas, entre cuchillos, machetes, tijeras y objetos corto-punzantes, objetos que portaban ciudadanos venezolanos.
Genny Tapia, intendenta de Policía, dijo estar preocupada por el aumento de fiestas clandestinas y la proliferación y aparecimiento de cantinas donde se concentran libadores en horarios diurnos y nocturnos.
Fuente: El Universo – Nota Original : LINK
