Cuando el Real Madrid batió al Barcelona en el Santiago Bernabéu por 2-0 el 1 de marzo, parecía que se hacía con el control en la carrera por el título.
Pero una semana después dieron la vuelta a sus posiciones al ganar los azulgranas a la Real Sociedad y los blancos caer ante el Betis.
Tres meses después ambas potencias deberán lidiar con las especiales condiciones de este final de temporada; entre ellas un calendario sobrecargado y la incógnita del estado de forma de sus futbolistas tras casi 100 días sin competir.
Traslado al estadio Di Stéfano
Entre las principales condiciones del protocolo sanitario que permite volver a jugar, hacerlo a puerta cerrada sin espectadores.
Suárez, operado de una rodilla, puede ser clave si se pone en forma en las próximas semanas, pero su técnico Quique Setién declaró que todavía no está preparado para jugar.
Hazard, en una primera temporada como jugador blanco marcada por las lesiones, ya entrena en el césped tras superar la operación en un tobillo a la que se sometió a principios de marzo. Tiene la oportunidad de resarcirse y mostrarse como un jugador decisivo.
La pelea del Atlético
El gran momento del Atlético llegó justo antes del parón, al superar al vigente campeón Liverpool en octavos de la Champions, en una eliminatoria agónica.
Pero el equipo dirigido por Diego Simeone sufre en la Liga. Descolgado de la pelea por el título, en el sexto puesto, está a un punto de la Real Sociedad (4º, 46 puntos), último que entraría en Champions, y a 13 del Barcelona (58).
Y en un contexto de crisis económica causada por la pandemia, asegurarse los ingresos de la ‘Champions’ la próxima temporada puede ser vital para los planes rojiblancos.
Presión en la zona baja
En este contexto, el Real Madrid recibió el permiso de la Liga para cambiar sus duelos de local en el Santiago Bernabéu por el estadio Alfredo Di Stéfano, principal cancha de su centro de entrenamiento, debido a los trabajos de remodelación que comienzan en el histórico recinto blanco.
Como ya se está viendo en la Bundesliga, el ‘factor cancha’, la ventaja que tienen los equipos locales por contar con el apoyo de sus hinchas, se diluye en la ‘nueva normalidad’. Anfitriones y visitantes parten en igualdad de condiciones en cada partido.
Regresos inesperados
Dos estrellas invitadas. Ni Luis Suárez, el goleador uruguayo del Barcelona, ni el belga Eden Hazard, el fichaje estrella del Real Madrid, contaban con volver a jugar esta temporada después de haberse lesionado de gravedad.
El Valladolid es 15º, cuatro puntos por encima de la zona de descenso, pero cuenta solo dos victorias en los últimos diez partidos.
El impacto económico de la pandemia de coronavirus es mayor en los clubes que luchan por no descender. Jugar en segunda supondría una crisis todavía mayor. La presión crece y queda 11 partidos para salvarse.
Nota Original: AFP – LINK