Frente al inminente paso al color amarillo del semáforo epidemiológico previsto para este jueves 21 de mayo, los servicios públicos de salud de Loja – se preparan para enfrentar un posible brote de casos de covid-19.
El médico Diego Alvear, dirige la Mesa Técnica de Salud del COE provincial. Tras analizar las cifras de contagios y la capacidad hospitalaria, él recomendó a las autoridades del COE cantonal esperar hasta el 3 de junio para pasar a la ‘nueva normalidad’.
Su argumento es que esta enfermedad infecciosa tiene cuatro fases y que el virus tiene un ciclo evolutivo de 75 días. “Ahora estamos en la fase de las complicaciones y necesitamos que la gente asuma una conducta responsable y de distanciamiento”, dijo Alvear.
Según las cifras del Ministerio de Salud Pública (MSP) el cantón Loja registra 248 de los 309 casos positivos que tiene la provincia. Solo los hospitales Isidro Ayora y del IESS atienden a los enfermos moderados y crónicos de esta pandemia.
Entre las dos casas de salud hay 200 camas para hospitalización intermedia y 20 equipadas en las unidades de cuidados intensivos (UCI). Aparte otras 25 entre los hospitales privados que reciben pacientes de otras patologías y que necesitan de UCI.
Según Ricardo Bueno, director del hospital del IESS, para los enfermos moderados tienen suficientes camas no así para los graves que tienen enfermedades crónicas y que necesitan de ventiladores. “Las camas de UCI de los dos hospitales están en su máxima capacidad”.
Según los análisis de Alvear, sino hay un comportamiento disciplinado de la gente en mantener la distancia social, en la primera semana de junio necesitarán 150 camas en UCI. Él dice que la gente debe entender que el cambio de semáforo no implica hacer superado la pandemia.
A esto se suma que Zamora tampoco tiene UCI y que los pacientes graves de esa provincia son transferidos a los hospitales de Loja.
Hasta la próxima semana, las autoridades de salud de Loja implementarán cinco camas, con ventiladores prestados de otros hospitales del país y proveedores de servicios. Además, gestionan ante el MSP la compra de ocho camas equipadas para UCI.
Bueno dice que si bien para el COE cantonal sopesó también la situación económica, “el problema no está en el color del semáforo sino en que la gente mantengan las medidas de protección” Él considera que si se presenta un rebrote habrá que regresar al encierro y que para evitar eso las instituciones públicas deben trabajar más en el tema de la educación y concienciación ciudadana.
Fuente: El Comercio-Nota Original: LINK