Comentó que existe personal militar y policial que tiene pensiones de retiro inferiores a 2013 dólares, montos que han permanecido congelados por muchos años. Ahora, se propone que las pensiones suban anualmente, acorde con los índices de la inflación, añadió.
No estamos topando nada en relación al seguro de vida que tienen los elementos uniformados, no así los civiles que somos parte de la seguridad social general, precisó, tras enfatizar que las reformas regirán para quienes se integran a la fuerza pública, luego de su vigencia.
Indicó que se plantea elevar de 20 a 25 años el tiempo de aportes de los miembros de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional para su retiro y pensión. La sugerencia es que la base de cálculo para el cobro de las pensiones de retiro se haga en función de las 60 mejores remuneraciones o haberes, que implica los cinco mejores años, ya no sobre la última remuneración, dijo.
Este mecanismo se aplicará para los miembros antiguos, con la salvedad que los nuevos se sujetarán a los techos de la seguridad social general y los antiguos seguirán con las mismas pensiones que venían recibiendo. Por ejemplo, un teniente coronel que se retira con una pensión de 2836 dólares, con la reforma obtendría 2727 dólares, mientras que la pensión de un coronel pasaría de 3889 dólares a 3739 dólares
Apertura al diálogo
Manifestó la total apertura para recibir a las personas y organizaciones interesadas en aportar en la construcción y formulación de leyes, en este caso para definir el informe para segundo debate. Oportunamente dialogamos con asociaciones de instituciones en servicio pasivo, así como con Ernesto González, autoridades de los ministerios de Defensa, Interior, Seguridad, que representan al ISSFA e ISSPOL; la norma de conducta se mantendrá firme al respecto, expresó.