“Negada”. Esta fue la respuesta que recibieron las directoras de los Guagua Centros de Quito frente a la acción de protección que habían presentado ante la justicia ecuatoriana.
El dictamen se conoció este martes 16 de junio. La audiencia estuvo fijada para las 10:00, en la Unidad de Violencia Contra la Mujer y Familia N° 1. Tatiana Castro, vocera de los establecimientos, indicó que la noticia se les dio sin argumentos verbales y apelaron.
“Solo estas palabras: negada la acción”. El pedido era que se deje sin efecto la resolución del Municipio, que establece la suspensión de los convenios mediante los cuales funcionaban los centros.
Esta se emitió en el marco de la emergencia por el covid-19. Antes de la audiencia se llevó a cabo un plantón en las afueras de la Unidad de Violencia. “Queremos justicia, queremos trabajar” fue uno de los clamores de trabajadores e incluso padres de niños que asistían a los centros.
Las personas llegaron usando mascarillas y portando carteles con consignas y los distintivos de los Guagua Centros. Para Castro, la respuesta que recibieron es una muestra de indolencia frente a una problemática de miles de mujeres profesionales.
Según datos del Patronato San José, unos 9 mil menores acudían a los centros, 720 educadoras y 360 de personal de apoyo.
Los establecimientos funcionaban mediante un convenio con las directoras. El Cabildo becaba a cada niño. De acuerdo con datos de la unidad municipal, el rubro era de USD 173,58 mensuales por cada menor.
Nelson Maldonado, director del Patronato, recordó que en mayo hubo una reunión con personeros municipales, incluido el alcalde Jorge Yunda, con la representante de los Guagua Centros para, justamente, definir un acuerdo. Luego de esto, cuando se había fijado una nueva cita, llegó la demanda de acción de protección y se rompió el diálogo.
Además, ese mes, el Patronato anunció un programa de alimentación denominado ‘Chiquitos’, dirigido a los usuarios de los Guagua Centros y que ya está en marcha.
Cuando presentaron el pedido legal, Castro aseguró que no fueron incluidas en dicha propuesta. No obstante, a decir de Maldonado, la certeza para después de la emergencia es que habrá un nuevo modelo de gestión y que, de hecho, los convenios bajo los que funcionaban los Guagua Centros terminaban en julio de este 2020.
No pudo asegurar qué pasará con los establecimientos pero sí que habrá el nuevo esquema, que deberá definirse. Y habló de un acercamiento con las directoras para que planteen sus inquietudes y dar la posición del lado municipal. Continuarán con la atención en alimentación.
Castro agregó que al no tener los rubros que la entidad les entregaba, USD 6 943 mensuales, las directoras “no podemos hacernos cargo de estos valores por lo tanto tenemos que obligatoriamente cerrar”.
Verónica Buitrón, madre de un niño que asistía a un Guagua Centro del sur de Quito, lamentó la decisión y dio cuenta de que los representantes de los menores se sienten desamparados por las autoridades.
“Los Guagua Centros son una ayuda para los padres que necesitamos trabajar y no tenemos dónde dejar a nuestros pequeños. Son un apoyo no solo para el cuidado sino para el aprendizaje. Al menos en el sitio al que iba mi hijo, las maestras trataban a los niños como madres. Ahora, no sabemos qué pasará”.
Fuente: El Comercio – Nota Original: LINK