Gabriela Rivadeneira, la presidenta oficialista de la Asamblea Nacional (Legislativo), hizo un llamamiento a la «paciencia» y a «la tolerancia» a los grupos opositores que han protestado ante el Consejo Nacional Electoral (CNE).
«No sigamos motivando a la violencia a un pueblo que necesita otra respuesta de sus actores políticos», aseguró Rivadeneira a periodistas.
La protesta opositora, que también se ha replicado en otras ciudades del país, obedece a la estrechez en el margen de votación del vencedor de los comicios del domingo pasado, el oficialista Lenin Moreno.
Su votación, aunque no ha concluido aún el escrutinio, no llega al umbral del 40 por ciento que se requiere para ganar la elección en una sola ronda de votaciones, pero está a menos de un punto porcentual de ese mínimo.
El segundo más votado, el exbanquero Guillermo Lasso, pese a que se mantiene por más de diez puntos porcentuales de votación por debajo de Moreno, reclama la segunda vuelta electoral, al considerar que su rival no llegará a alcanzar la votación suficiente.
La norma ecuatoriana establece que un candidato vencerá en una sola vuelta si alcanza más del 50 por ciento de votos o, al menos, el 40 por ciento con una diferencia de diez puntos porcentuales con respecto al segundo más votado.
Con el 91,5 por ciento de actas de escrutinio procesadas, Moreno obtiene el 39,07 por ciento de votos y Lasso el 28,43 por ciento.
Es ese porcentaje de menos de diez puntos porcentuales de actas de votación que aún no han sido procesadas lo que tiene a los ecuatorianos en vilo, ya que aún podría inclinar la balanza a uno u otro lado.
Según Rivadeneira, el oficialismo está expectante del desenlace del escrutinio, pues aún abriga esperanzas de que Moreno alcance el 40 por ciento y no sea necesaria una segunda vuelta electoral.
«Hay posibilidad de llegar a la Presidencia en una sola vuelta, pero si no (se alcanza ese objetivo), enfrentar esa segunda vuelta como lo hemos hecho siempre, con mucha altura», sostuvo la jefa del Legislativo.
Y es que decenas de simpatizantes del movimiento CREO, de Lasso, se congregaron hoy en las afueras de la sede del Consejo Nacional Electoral para exigir al organismo que convoque la segunda vuelta electoral.
Los manifestantes no solo han exigido la segunda vuelta, sino que han coreado la antigua consigna de «Fuera Correa, fuera», con la que alientan a la salida del poder del actual mandatario, Rafael Correa, quien entregará el cargo en mayo próximo al candidato que triunfe en los comicios.
Los grupos de oposición han convocado a los ciudadanos a mantener la presión ante el CNE, pues temen que se pueda fraguar un «fraude», extremo que la autoridad electoral y las misiones internacionales de observación electoral han descartado.
