Este viernes, la JEP dijo en un comunicado que la extracción debe realizarse “de manera inmediata”.
Las personas que deben ser retiradas del Catatumbo son exintegrantes de la extinta guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que firmaron un acuerdo de paz con el Gobierno. Según la JEP y el gobierno del presidente Gustavo Petro, estos son blanco de ataques de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Por estos hechos, Petro suspendió el proceso de paz que sostenía con el ELN, cuyos actos calificó de “criminales”. En respuesta, el ELN ha dicho que se está defendiendo de presuntas agresiones de exmiembros de las FARC y de operaciones de inteligencia del Ejército.
Desde que comenzaron los hechos de violencia en el Catatumbo, al menos 80 personas han muerto. En su comunicado de este viernes, la JEP —una instancia creada en 2017 a partir del acuerdo de paz y que debe procesar los delitos cometidos en el marco del conflicto armado que vivió Colombia— señaló que entre esas víctimas mortales tiene registro de al menos seis firmantes de la paz asesinados.
La JEP también ordenó a la Fiscalía General de Colombia y a la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas que diseñen y ejecuten un plan para buscar a 12 firmantes de la paz desaparecidos desde que empezó lo que calificó de “crisis humanitaria” en el Catatumbo.
Por esta situación de violencia, miles de personas se han desplazado de sus localidades, de acuerdo con la Defensoría del Pueblo. Hasta el martes, la institución tenía registro de 32.000 desplazados.
CNN