Trujillo, Koncke y otros cinco diplomáticos tenían previsto viajar a Nicaragua para intentar dialogar con el presidente Daniel Ortega y buscar una salida a la crisis que comenzó el 18 de abril de 2018 y que ha dejado cientos de muertos, presos y desaparecidos, además de miles de nicaragüenses en el exilio.
Algunos de los diplomáticos a los que Ortega decidió impedir el acceso a Nicaragua forman parte de una comisión creada a finales de agosto por la Organización de Estados Americanos (OEA).
Ese ente tiene un plazo de 75 días para intentar negociar con Ortega.
Si esa comisión fracasa y Ortega se niega a dialogar, la OEA podría suspender a Nicaragua, la mayor forma de sanción que tiene la organización.
En 70 años de historia, solo ha usado en dos ocasiones: con Honduras, en 2009, después del golpe de Estado; y con Cuba tras el triunfo de la Revolución de Fidel Castro, en 1959.
Fuente: Agencia EFE – Nota Original: LINK