La medida Pico y Placa no se aplicará el 25 de diciembre y el 1 de enero porque es feriado de navidad y fin de año respectivamente. Mientras que el 24 y 31 de diciembre se controlará normalmente a los vehículos que terminan el último dígito de la placa en 7 y 8 en esos días.

Por ello, los controles de esta medida se realizan permanentemente esto es: los lunes en que no pueden circular los autos cuyas placas terminen en 1 y 2, los martes, aquellos con 3 y 4, miércoles 5 y 6, jueves 7 y 8 y finalmente el viernes para los de placa terminada en 9 y 0.

El horario de restricción es de 07:00 a 09:30 en la mañana, y en la tarde y noche de 16:00 a 19:30 y está vigente dentro del perímetro de restricción limitado por la avenida Simón Bolívar al oriente y la avenida Mariscal Sucre al occidente, y en los días laborables, es decir, no aplica ni los fines de semana ni los días declarados oficialmente feriados.

El 30 de mayo de 2014, después de 16 días posesionado Mauricio Rodas como Alcalde de Quito, el Concejo Metropolitano aprobó por unanimidad las reformas a las Ordenanzas 221 y 305, con lo que se redujo al 50% los montos y sanciones por contravención de las restricciones del Pico y Placa y por exceder el tiempo de uso permitido de la Zona Azul. Adicionalmente, fue eliminada la retención del vehículo por más de 24 horas.

La reforma señalaba que los propietarios de los vehículos que contravengan los planes de restricción y de regulación serán sancionados con una multa equivalente al 15% de un Salario Básico Unificado; en caso de reincidencia por segunda ocasión, con una multa equivalente al 25%, y, en caso de reincidencia por tercera ocasión o más, con una multa equivalente al 50% del Salario Mínimo Unificado.

Con esto los vehículos que contravienen las disposiciones del Pico y Placa ya no son retenidos por más de 24 horas sino el tiempo que dura el pago de la multa por parte del infractor. Las multas se redujeron en un 50% es decir de $113,33 a $56,66, la segunda vez $170 a $85 y la tercera vez de $340 a $170 dólares.