Cinco patrullas de la Agencia de la Policía Metropolitana de Seúl fueron enviadas al lugar, de acuerdo con el registro remitido al diputado opositor Lee Tae Won y citado por la agencia de noticias surcoreana Yonhap.
La primera patrulla en llegar fue la Número 11, que se presentó en el lugar a las 23:40 horas del 29 de octubre por orden de Lee Im Jae pese a que la primera llamada de emergencia al 112 fue recibida a las 22:15 horas. Otras cuatro patrullas llegaron entre las 23:50 y la 1:40 del día siguiente. Lee, actualmente suspendido, llegó a su puesto a las 23.05, unos 50 minutos después del comienzo de la tragedia.
Al parecer insistió en trasladarse en su coche desde el restaurante en el que estaba cenando con compañeros de la Policía hasta la comisaría a pesar de la inmensa congestión de tráfico en que estaba sumida la zona. La comisaría está a apenas 10 minutos a pie del restaurante.
También llegaron ocho unidades de policías de reemplazo cuya función es apoyar a los policías profesionales. Llegaron entre las 0:50 y la 1:12 horas. El informe menciona además cómo supuestamente se borró tras el incidente un informe interno de los servicios de inteligencia de la Policía que alertaba de posibles incidentes relacionados con las fiestas de Halloween.
El informe nunca fue entregado a los mandos policiales y el hecho de que se haya borrado apunta a que los agentes pretendían encubrir su inacción.
Por otra parte, el diputado opositor Cheon Jun Ho ha publicado que los Bomberos recibieron una llamada de emergencia al número 119 a las 22:12 horas en la que el afectado aseguraba tener problemas para respirar y que colgó poco después entre murmullos. El primer equipo de rescate fue enviado a la zona a las 22:17 horas y se solicitó la colaboración de la Policía un minuto después. El centro de emergencias del Ayuntamiento de Seúl fue avisado a las 22:28 y el Ministerio del Interior a las 22:48. La Presidencia fue informada a las 22:53.
Miles de personas se manifestaron en Seúl para recordar a las víctimas de la avalancha humana que costó la vida a al menos 156 personas el pasado 29 de octubre en una fiesta de Halloween y para protestar contra las autoridades, a las que responsabilizan de la tragedia.
Las autoridades han anunciado una investigación sobre lo ocurrido y se han registrado oficinas municipales, comisarías y estaciones de bomberos. La Policía Nacional y el presidente Yoon Suk Yeol se han disculpado por lo ocurrido y han prometido mejorar las medidas de seguridad para futuras ocasiones. Sin embargo, esta respuesta no ha bastado a una población indignada por lo ocurrido.
Fuente: El Comercio – Nota Original : LINK
