Tras meses de espera, la primera solicitud de Ecuador para que Interpol difundiera una alerta roja contra Correa, prófugo de la justicia ecuatoriana tras no comparecer en Quito, fue negada el 5 de diciembre.
Sin embargo, Balda, que presentó su petición ante la Corte Nacional de Justicia, sostiene que esta negativa responde a que, cuando se pidió el arresto del exmandatario se hizo «solamente» con base en una orden de prisión preventiva, dado que no se había presentado en la corte como había exigido la jueza a cargo del caso, Daniella Camacho.
Ahora, argumenta el político, existen otros elementos legales, como es el procesamiento de Correa, a quien la Fiscalía ecuatoriana acusa de haber ordenado su secuestro en Colombia hace seis años desde la Presidencia.
«Ya Rafael Correa ha sido llamado a juicio, existen pruebas que han sido consideradas como válidas dentro del proceso y además ha sido declarado oficialmente para la justicia ecuatoriana como prófugo», dijo Balda tras hacer entrega del documento.
El exasambleísta conservador estuvo secuestrado apenas hora y media, ya que un taxista alertó a la policía colombiana y esta consiguió liberarlo.
La intervención de Interpol es necesaria porque Correa reside en Bélgica desde junio de 2017, poco después de dejar el poder en manos de sus sucesor y ahora rival político, Moreno.
El exmandatario asegura que no tuvo ninguna relación con ese secuestro y que el hecho de haber sido presidente no significa que lo supiera todo ni le hace responsable.
Fuente: EFE, aliado estratégico de FM Mundo