“¿Se olvidaron ya que todos los banqueros pusieron sus bienes en “fideicomisos” para que no puedan ser tocados? Nos llevó AÑOS desbaratar todo aquello”, recordó el jefe de Estado a través de su cuenta de twitter.
Afirmó que crear un fideicomiso “es crear artificialmente una figura jurídica PRIVADA” lo cual implicaría “privatizar los impuestos”. Dijo que eso es absurdo e inconstitucional.
“Con su dinero, sostuvo, pueden hacer los fideicomisos que quieran -es legal, aunque a veces inmoral-, pero NO con el dinero PÚBLICO”, apuntó.
De acuerdo con la normativa ecuatoriana, los recursos públicos solo pueden manejarse a través de la cuenta única del Estado. Adicionalmente, el uso de esos recursos está transparentado y abierto al público
El presidente de los ecuatorianos advirtió que “es la estrategia de inventarse cualquier cantinflada para impedirnos gobernar” y recordó que “nuestra oligarquía saca su plata de Ecuador a fideicomisos en paraísos fiscales para ocultar sus jugadas financieras y eludir impuestos”.
Trajo a la memoria de los ecuatorianos que “los que quebraron y saquearon al país fueron ellos y sus recetas, no nosotros”.
El gobierno envió a la Asamblea Nacional un proyecto de ley que busca recaudar recursos para aportar a las tareas de reconstrucción y reactivación de las zonas afectadas por el terremoto, principalmente la provincia de Manabí y algunos sectores de Esmeraldas.
La propuesta, que será temporal, contiene beneficios tributarios para quienes habitan las provincias afectadas, así como contribuciones, para intervención en las zonas devastadas por el terremoto. Este proyecto busca la recaudación de alrededor de mil millones de dólares, según proyecciones oficiales.
Uno de los promotores de la creación de un fideicomiso es el banquero Guillermo Lasso, actual candidato presidencial por el movimiento CREO y quien ocupó el Superministro de Economía en el gobierno del derrocado presidente y responsable del feriado bancario en Ecuador, Jamil Mahuad.
Según Lasso, a ese fideicomiso irían todos los recursos provenientes de impuestos temporales, venta de activos del Estado, créditos y donaciones locales y del exterior.