El actor británico Robert Pattinson consigue por fin hacer olvidar la saga Twilight (Crepúsculo) con una espectacular interpretación en Good Time, una película en la que se transformó tanto que nadie le reconoció durante el rodaje, que se desarrolló por las calles de Nueva York.

Instagram Oficial

Más de un año de trabajo le llevó a Pattinson meterse en la piel de Connie, un personaje muy diferente a todo lo que ha hecho hasta ahora.
Alguien «amoral que no se interesa por nadie hasta que se ve entre la espada y la pared y se ve forzado a interesarse en algo, lo que supone una situación nueva para él».
Una historia que se desarrolla en el barrio neoyorquino de Queens, donde Connie y su hermano Nik cometen un atraco a un banco que sale mal.