“Hay la decisión pero no para rehacer el tercer producto, sino para hacer una pericia nueva dentro de la Fiscalía”, comentó Ochoa antes de participar en una diligencia preparada este 22 de noviembre por la Fiscalía en el marco de las investigaciones por la muerte del oficial registrada el 19 de diciembre de 2010 al pie de su casa donde fue baleado.
Las primeras investigaciones registradas en el gobierno anterior en torno a este caso concluyeron que el crimen fue producto de la delincuencia organizada. Una comisión legislativa que se formó en las últimas semanas para revisar el proceso concluyó que hay indicios de que habría sido un crimen de Estado, derivado de sus denuncias por la compra de helicópteros para las Fuerzas Armadas.
Por ello, el Legislativo remitió el documento a la Fiscalía del Estado como un insumo más dentro de las nuevas indagaciones en torno a este caso. Ochoa aseguró que una vez que la Comisión de la Asamblea ya emitió su resolución en un informe respecto al caso, le compete a la Fiscalía y a los diferentes órganos de control el guiarse por las recomendaciones y conclusiones que fueron emitidas en ese documento. La reunión por videoconferencia continuó pasado el mediodía.
Fuente: El Telégrafo – Nota original: LINK