“Por eso invito a los compañeros del ELN a que, con la autoridad que me da haber avanzado en mi gobierno en las negociaciones con ellos, se avengan a la solicitud que hace el gobierno y nos permitan a quienes vivimos en Ecuador tener el placer de recibirlos acá para abrir sus mesas de negociaciones”, señaló en rueda de prensa desde la sede de la Unasur, en la ciudad ecuatoriana Mitad del Mundo.
“No sería aceptable que se abriera una mesa de negociación existiendo en manos del grupo que está allí sentado personas que se mantienen privadas de la libertad, por eso la insistencia del gobierno de que se cumpla este requisito”, señaló al referirse a Sánchez, aunque sin mencionar el nombre.
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, decidió suspender hasta nuevo aviso el inicio de las conversaciones con el ELN hasta tanto no vea “sano y salvo” al excongresista que permanece secuestrado hace unos seis meses por ese importante grupo guerrillero, de alrededor de 3.000 combatientes.
Samper dijo que apoya “sin vacilación” la demanda de Santos y argumentó que, de otra manera, la mesa de diálogo “comenzaría deslegitimada”.
Recordó que el gobierno del mandatario colombiano había establecido dos condiciones básicas para que esta mesa ese instale formalmente, una es una agenda y la otra, gestos que evidencien un claro compromiso con las normas del derecho internacional humanitario, especialmente al tema de los secuestrados.
Indicó que el ELN ha sido siempre muy respetuoso de que en los acuerdos iniciales se considere como una condición el respeto del derecho internacional humanitario y que este se aplique en la negociación. “Creemos que así debe ser, pero compartimos también la solicitud del Presidente (Santos) para que el gesto humanitario más importante que pueden dar en este momento es devolver a la libertar a las personas que se encuentran secuestradas”, comentó.
En ese orden, el titular de la Unasur dijo que es “optimista” respecto a las posibilidades del avance de la mesa de negociaciones en Ecuador porque conoce a quienes darán y liderarán el apoyo a este diálogo y porque por lo menos un 60 %de los acuerdos de La Habana entre el gobierno y las FARC-EP son aplicables al ELN, en especial los referidos a mecanismos de paz, a compromisos de participación política y a la existencia o no de normas relacionadas con la justicia transicional.
Opinó que es mejor no poner plazos para el diálogo, sino que se puede esperar unas semanas más para que dé inicio, aunque todos están ilusionados en que ocurra lo más rápidamente posible.