«Él es la persona adecuada para dirigir la misión urgente de detener la inmigración ilegal y asegurar nuestras fronteras, racionalizar al TSA y mejorar la coordinación entre la inteligencia y las fuerzas del orden», dijo Trump en un comunicado. «Con el general Kelly al frente del DHS, el pueblo estadounidense tendrá un líder comprometido con nuestra seguridad».
Como exjefe del Comando Sur de Estados Unidos, Kelly fue responsable de la gestión de amenazas a la seguridad que presentan las redes criminales de la droga basadas en América Central y del Sur, un tema que Trump resaltó en su campaña.
Kelly también supervisó las operaciones en las polémicas instalaciones de detención de Guantánamo. El general se enfrentó al impulso de la administración Obama por cerrar el centro.