Daniel Noboa Azín, de 35 años, fue posesionado como Presidente de la República, y Verónica Abad como Vicepresidenta. Si bien el Primer Mandatario condenó que él y su familia han experimentado persecuciones políticas en diferentes Gobiernos, hizo un llamado a la unión para acabar con la “violencia y la miseria”.

Créditos: Presidencia

El empresario es el sucesor de Guillermo Lasso, quien no pudo terminar su periodo y dictó la muerte cruzada por problemas de gobernabilidad.

Durante su discurso de posesión, el Primer Mandatario se mostró conciliador y lleno de expectativas. Destacó la juventud de su gabinete, y reiteró que enviará proyectos urgentes para que sean tratados en la Asamblea.

Luego de la investidura, Noboa mantuvo su primer encuentro bilateral con su homónimo Gustavo Petro. Horas más tarde firmará los Decretos con los que posesionará a su equipo de trabajo.

Por su parte, el presidente de la Asamblea, Henry Kronfle, arremetió contra Guillermo Lasso durante su discurso, e hizo un llamado a dejar de lado los “egos” en la política, y a cumplir las promesas hechas en campaña.

Reacciones tras la ceremonia

Mónica Palencia ratificó que será parte del equipo de Noboa, y reveló que si bien la idea de fusionar los Ministerios de Gobierno y del Interior sigue en pie, indicó que el deseo es mantener ambas carteras de Estado por separado, pero con ella a la cabeza.

Roberto Izurieta, secretario de Comunicación, reaccionó a los cuestionamientos al Ejecutivo por la demora en el nombramiento de los ministros. Aclaró que los tiempos, al ser reducidos por la muerte cruzada, dificultaron la conformación de las autoridades.

Por último, Pierina Correa, asambleísta por Revolución Ciudadana, mencionó que recibirán y evaluarán los dos proyectos de Ley que enviará Noboa al pleno, aunque ratificó que la agenda de la bancada incluye el juicio político a la fiscal Diana Salazar.

Aquí el discurso completo de Daniel Noboa

El resultado de esta elección evidencia que aquellos que ven la política como una realidad de extremos y revanchas, no tendrán el respaldo popular.

Somos un grupo de personas libres y pragmáticas que busca con empatía mejorar la vida de los ecuatorianos, representamos a los jóvenes que depositaron su esperanza en Daniel Noboa.

Muchos buscan encasillar al nuevo Gobierno en viejos paradigmas políticos o ideológicos, pero nosotros nos concentramos en el cambio y en el futuro.

El cambio que el país requiere tiene un sentido de urgencia, y los jóvenes tenemos la audacia de responder a ellos.

No somos anti nada: somos un pro Ecuador. El anti tiene un techo y el pro es infinito.

No podemos seguir repitiendo las mismas políticas del pasado esperando tener resultados distintos.

Respetamos la experiencia y la madurez, sin embargo, la juventud es sinónimo de fuerza. Fuerza para vencer los retos que el Ecuador necesita.

Para combatir la violencia hay que atacar la desocupación. El país necesita empleo, y para generarlo enviaremos reformas urgentes a la Asamblea que deben ser tratadas con responsabilidad.

Trabajaremos por un Estado con metas claras y medibles, planificado, con objetivos, pero siempre midiendo los avances.

Aquellos que busquen encerrarnos en viejos esquemas, fracasarán. Somos libres, libres de prejuicios y políticamente distintos para muchos. Pero así es el Ecuador, libre, diverso y emprendedor.

Pocos gabinetes en la historia han sido tan diversos como este: nunca hemos tenido la participación de tantas mujeres, ni de jóvenes. Es una mezcla que representa a todo el Ecuador, y es lo que el país necesita para crecer. Un Ecuador que incluya a todos.

Invitamos a los ecuatorianos a trabajar en conjunto para acabar con el enemigo en común: la violencia y la miseria.

El éxito no es haber llegado, será cuando nos vayamos con el respeto y cariño de la mayoría de los ecuatorianos y ese éxito solo va a ocurrir si nos unimos.