Pero también exigió que el Gobierno de Nicolás Maduro permita el ingreso de la ayuda humanitaria y deploró los actos represivos, tanto de militares como de grupos paramilitares venezolanos, y manifestó su respaldo a las autoridades de la Asamblea Nacional, cuyo titular, Juan Guaidó, se proclamó presidente interino de Venezuela.
Los hechos violentos ocurridos el 23 de febrero en contra del ingreso de la ayuda humanitaria desde Cúcuta, Colombia, implica la “urgencia de alcanzar una solución política, pacífica y democrática”, dijo.
“Ecuador rechaza el uso de la fuerza pública y la acción de grupos paramilitares contra manifestantes pacíficos, y las muertes y heridas sufridas por algunos de ellos, como fue el caso de venezolanos de la comunidad indígena Pemón”, dijo Gallegos.
En ese sentido, Ecuador “no respalda una intervención militar en Venezuela. La solución a la crisis venezolana se alcanzará solo mediante el diálogo y la concertación. Hacemos un llamado para que se continúe trabajando con el fin de que Venezuela siga una transición pacífica hacia el camino democrático que salvaguarde y garantice la integridad, el ejercicio y el pleno respeto de los derechos humanos de su pueblo.
El Embajador también mencionó que Ecuador es el país el más abierto en la región para los refugiados: : 63 537 personas procedentes de más de 70 países. Y ha acogido a más de 240 000 ciudadanos venezolanos, de los cuales casi 101 000 ya cuentan con visa de permanencia regular, “sin incluir la de protección internacional”.
Por eso, el 8 y 9 de abril convocará a la Tercera Reunión Regional para tratar la complejidad que existe por la migración de tres millones de ciudadanos venezolanos.
Pero ante la inmediatez de la crisis por “las carencias y conflictividad en Venezuela”, se vuelve necesaria “una solución política inmediata a fin de evitar efectos negativos adicionales en su población y en la región.
Se requieren urgentes entendimientos para dar paso a elecciones libres, sin exclusiones de ningún tipo, transparentes, con garantías de neutralidad de autoridades de transición y con observación internacional, en el marco de la ley venezolana. Solo la legitimidad democrática garantizará la futura estabilidad institucional del país y la tarea de recuperación de la economía y orden social, que compete a los venezolanos y que requerirá el apoyo solidario de la comunidad internacional”, sostuvo Gallegos.
Fuente: El Comercio- Nota original: LINK