Durante esta jornada, un equipo de Ecuavisa acompañó a 60 policías de varios grupos especializados hasta la cima de una montaña donde miles de mineros circularon diariamente por dos años para realizar la actividad ilegal.
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En este recorrido se evidenció el grave daño a la naturaleza que dejaron quienes trabajaban en el procesamiento del material aurífero. Habían túneles tapados por plásticos, covachas y otras rústicas estructuras en las que funcionaron prostíbulos, bares y hasta una iglesia.
Desde el pasado lunes rige en esta localidad un estado de excepción que ha movilizado a 2.400 efectivos de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional.
Con la acción de este viernes se concluye la primera etapa de este operativo donde además se han decomisado armas, vehículos y dinero en efectivo.
Según las autoridades, además de los cuatro cuerpos hallados, algunos más podrían estar enterrados en la zona.
Fuente: Ecuavisa- Nota original: LINK
