El sacrificio fiscal de esos años, en su orden, sería de USD 25 millones y de USD98 millones.
El ministro habló sobre la necesidad de nuevos ingresos para el fisco tomando en cuenta el excesivo endeudamiento y los elevados déficits que ha presentado en los últimos años el país. También explicó que para este año se han aumentado las presiones fiscales, por ejemplo, el cumplimiento con los jubilados, el pago del 40 % del IESS y el cumplimiento de la Ley Amazónica.
El funcionario explicó la importancia de equilibrar las reservas del Banco Central del Ecuador y que haya independencia, así como la necesidad de bajar el nivel de discrecionalidad de cambios en el presupuesto. Antes era del 15 % y ahora será del 5 %.
Varios asambleístas hicieron cuestionamientos al ministro sobre temas como si se tomarán en cuenta los recursos de la reforma en la proforma presupuestaria. Hubo inquietud sobre la autonomía del Central tanto en el tema sueldos como en una supuesta liberación de responsabilidades a sus altos funcionarios.
Fuente: El Universo, nota original aquí: LINK