La exfuncionaria del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), María Sol Larrea, se encuentra en la sala de audiencias 405, del Complejo Judicial Norte, en Quito.
Este lunes 2 de diciembre, se realiza la audiencia de formulación de cargos por supuesto lavado de activos en contra de la exfuncionaria, su esposo, Marcelo Espín; su cuñado, Carlos Espín; y seis empresas vinculadas a la pareja, cuyo giro de negocio son los servicios médicos.
El fiscal Mario Andrés Muñoz, de la Unidad Antilavado, indicó al juez que las empresas de Larrea y su esposo mantuvieron contratos con el IESS por USD 35 millones cuando ella era funcionaria.
También señaló que después del 2018, luego de que la pareja fuera sentencia por enriquecimiento ilícito y enriquecimiento privado no justificado, ellos disolvieron su sociedad conyugal y traspasaron bienes y acciones de empresas a nombre de sus hijos y cuñado.
Desde agosto del 2017, hasta el viernes pasado, mientras Larrea se encontraba presa, recibió un salario mensual de USD 5 600 provenientes de tres empresas. En estos momentos, el fiscal continúa con la presentación de las evidencias en contra de los sospechosos.
Fuente: El Comercio – Nota Original: LINK