El Juez acogió el pedido de Fiscalía y dictó prisión preventiva contra todos.
En la audiencia de calificación de flagrancia y formulación de cargos, el Fiscal del caso señaló que la Institución conoció sobre el hecho luego de la denuncia presentada por familiares de los secuestrados, que señala que ellos se habrían trasladado hacia Guayaquil, desde El Oro, para concretar un supuesto préstamo de dinero.
Según las versiones recabadas luego de su liberación, las víctimas llegaron a un inmueble ubicado en el bloque 10 de Bastión Popular. En ese lugar se encontraban entre quince y veinte personas que, bajo amenazas con armas de fuego y cortopunzantes, los agredieron físicamente, después los amarraron e ingresaron a una habitación.
Las víctimas fueron despojadas de sus pertenencias (dinero en efectivo, tarjetas de crédito, documentos personales, celulares y un vehículo en el que se trasladaron al lugar) y después de tres días se contactaron con sus familiares para extorsionarlos, exigiendo 50.000 dólares para liberarlos con vida.
Luego de activar el protocolo de búsqueda se ubicó el vehículo de la persona secuestrada. En ese lugar se aprehendió a tres personas, quienes informaron donde se encontraban las víctimas. Inmediatamente se ejecutó un operativo y se capturó al custodio de los dos secuestrados.
Él señaló que otras tres personas –participantes del hecho– estaban en una vivienda cercana y también fueron aprehendidas.
Para sostener este relato, el Fiscal de turno presentó los elementos de convicción durante la audiencia, entre ellos, el parte informativo y de aprehensión, las versiones de los agentes, las denuncias presentadas por los familiares de las víctimas. Las armas de fuego y las cortopunzantes fueron ingresadas a la cadena de custodia de la Policía Judicial.