Ledesma señaló que un eventual fraccionamiento de Quito sería «nefasto» y que quienes apoyan la propuesta no tienen conocimiento de las consecuencias que esto podría acarrear. Para iniciar, explicó la concejala, se deberían conformar nuevas empresas municipales, como la de Agua Potable o de Obras Públicas.
Asimismo, indicó que las asignaciones presupuestarias del Gobierno central también se afectarían, además de que no se traería una solución. Entre las nueve parroquias que apoyan la cantonización suman cerca de 200.000 habitantes, frente a otras importantes de Quito, como la de Calderón, que concentra al menos 500.000 habitantes.
Sin embargo, que este problema surge, principalmente, por la falta de eficiencia en trámites, como la legalización de barrios. A esto se suma la débil o nula ejecución presupuestaria de las Administraciones Zonales, como la de los Chillos, que tiene el 0.01 % de ejecución. El Proyecto de Resolución propone una suerte de Alcaldías menores, para que los servicios municipales lleguen a toda la ciudadanía.
Es necesaria la desconcentración y la autonomía, que debe normarse a través del Estatuto Autonómico de Quito, indicó Ledesma.
Mira la entrevista completa:
Escucha el entrevista completa: