Es la primera vez en la historia aeroespacial que el mismo cohete se utiliza en dos misiones separadas.
Después de poner en órbita un satélite con éxito, el cohete regresó a la Tierra y aterrizó en una plataforma en el Océano Atlántico. Fue el sexto aterrizaje con éxito de la compañía en una plataforma marítima, llamada Of Course I Still Love You (Por supuesto que aún te quiero).
El aterrizaje tuvo lugar alrededor de ocho minutos después del lanzamiento.
«Esto demuestra que puedes volar y volver a volar un propulsor, que es la parte más cara del cohete», dijo Musk en una transmisión en SpaceX. «Esto es una gran revolución en los viajes espaciales».
Y poco después de este éxito, Musk anunció en Twitter el próximo objetivo de SpaceX: lanzar un cohete dos veces en 24 horas.
El lanzamiento fue un gran paso para SpaceX. La reutilización de los cohetes es esencial para compañías como SpaceX que quieren reducir el costo de los viajes espaciales.
El cohete Falcon 9 de SpaceX cuesta alrededor de 62 millones de dólares. Al usarlo más de una vez, el precio de un lanzamiento puede reducirse drásticamente.
SpaceX ha estado trabajando hacia su objetivo de utilizar cohetes reciclados durante más de un año. Realizó 14 intentos de recuperar la primera sección de sus cohetes Falcon 9, y hasta el momento ha tenido éxito en nueve ocasiones.
El cohete SpaceX usado este jueves fue utilizado previamente en una misión para la Estación Espacial Internacional en abril de 2016.