El Jefe de Gestión de Artes Gráficas del IGM, teniente coronel Byron Puga, aseguró que no detectaron ningún inconveniente y que todo el material electoral tenía todas las seguridades contempladas por la entidad para evitar una eventual falsificación.
En el caso de las papeletas, explicó, cuentan con cinco seguridades como tintas especiales, textos y números que se observan solo con lupa. Por ejemplo, en el recuadro donde se coloca el voto existe el texto CNE repetido en varias ocasiones y una de esas repeticiones dice únicamente CN. Este error intencional permite determinar la originalidad del documento. También existen un texto oculto (letras y números) en la parte oscura de la fotografía de los candidatos.
Otra seguridad es la tinta reactiva a la moneda. Es decir que al raspar con una moneda en la parte superior de la papeleta se encontrará un texto. Esto solo se puede hacer con el software que posee el IGM.
La institución desmintió así los falsos rumores que se generaron sobre las papeletas electorales que se recontaron el martes pasado. El excandidato vicepresidencial Andrés Páez, pese a no haber asistido al recuento de votos, pidió vía twitter una verificación de autenticidad de los documentos por considerar que «las papeletas no estaban dobladas”.
«No hemos encontrado ni una sola papeleta que no sea original», enfatizó.
Puga explicó las actas electorales fueron impresas en papel especial de seguridad, que tiene el sello del CNE y fibrillas solo perceptibles con luz ultravioleta y que se detecta con un dispositivo especial.