El pasado 23 de junio, en el sector de la Mariscal, norte de Quito, un abogado sufrió un ataque armado en los exteriores de su oficina. En Notimundo Estelar, David Ortuño, hermano de la víctima, informó que el estado de Renato es crítico, ya que de los nueve disparos que le propiciaron, uno lo destrozó la cervical, causándole una cuadriplejia. Reveló que la información del caso hasta el momento es escasa, y que el supuesto autor del hecho, quien está detenido, recibió un pago de USD 1.000.

Créditos: Policía Nacional

La mañana del viernes 23 de julio, se reportó un ataque armado en contra de Renato Ortuño, un abogado de 36 años que trabajaba en el sector de La Mariscal, en el norte de la capital.

David Ortuño, familiar de la víctima, relató que su hermano fue perseguido por un grupo de delincuentes aproximadamente 30 kilómetros desde que salió de su domicilio en el Valle de los Chillos, cerca a la parroquia Amaguaña.

Mi hermano sigue en una condición crítica. Recibió nueve disparos, de esos, tres pegaron en su cuerpo, uno en el hombro, uno en la parte del cráneo y el más mortal le destrozó la cervical”, detalló.

Tras sufrir este ataque, Renato estuvo en cirugía aproximadamente seis horas. Sin embargo, los restos de la bala y huesos destruyeron la zona que conecta el cerebro con el resto del cuerpo, por lo cual no puede sentir ni controlar sus brazos, manos y pies.

¿Qué se sabe del caso?

Horas después del ataque, el comandante General de la Policía, Fausto Salinas, informó que en el sector de Chimbacalle se detuvo al presunto autor del hecho, un ciudadano de nacionalidad venezolana que registra procesos penales en su país.

La Fiscalía General del Estado indicó que se formularon cargos a Jesús P., por homicidio en grado de tentativa. Hasta el momento, el implicado no ha confesado mayores detalles del hecho, salvo que recibió un pago de USD 1.000. 

Según la información que le han proporcionado a la familia, el ciudadano extranjero ingresó al Ecuador hace un año con un pase irregular, y vivía con su esposa y tres hijos en el sur de Quito, donde fue detenido.

Además, en Venezuela estuvo recluido 12 años por robo agravado. Su padre también cumplió una condena en ese país.

Lo último que recuerda la víctima, según su hermano, es haber visto por el retrovisor a quien le propició los disparos, escuchar golpes en la nuca y sentir que su cabeza caía.

“Emocionalmente está destrozado. Con sufrimiento me logra contar que no tiene enemigos, no sabe quién pudo haberle hecho esto”, detalló Ortuño.

De su lado, los miembros de su familia, quienes cuenta ya con seguridad por parte de la Policía, realizan todo lo posible por la salud de Renato, mientras que las autoridades llevan a cabo la investigación para dar con los demás responsables del caso.


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