El viernes, más de 8000 venezolanos cruzaron la frontera en Tumbes, el mayor número registrado en un solo día. De ellos, 4700 presentaron solicitudes de asilo en Perú, también un número sin precedentes.
“Las personas están llegando en una situación cada vez más vulnerable”, dijo Federico Agusti, representante de la Agencia en Perú. “Algunos de ellos han caminado por 30 o 40 días a través de varios países de la región. Vemos a personas que sufren de desnutrición o deshidratación, así como personas con problemas médicos. Hay cada vez más familias con niños”, añadió.
El gobierno peruano anunció que a partir del sábado 15 de junio les exigirían pasaporte y visa a los venezolanos para entrar al país. Los días previos a la implementación de la medida los migrantes y refugiados que ingresaron al país se multiplicaron. Las autoridades peruanas en la frontera trabajan las 24 horas al día para poder procesar a los recién llegados.
Acnur también está trabajando contrarreloj en el terreno, brindando asistencia humanitaria y servicios de salud, información y apoyo legal a las personas refugiadas y migrantes en ambos lados de la frontera. La ONU además informó que los nuevos requisitos de visado de Perú para los venezolanos han impactado la frontera norte de Ecuador con Colombia, a través de la cual ingresaron ayer 8380 venezolanos, según las autoridades.
Ante la magnitud de la emergencia, Acnur solicitó a la comunidad internacional que intensifique su apoyo a países como Colombia, Ecuador y Perú, que han estado recibiendo a la gran mayoría de los cuatro millones de refugiados y migrantes de Venezuela, la mayoría de los cuales necesitan asistencia humanitaria.
Fuente: El Telégrafo – Nota Original: LINK