El expresidente chileno Sebastián Piñera (2010-2014) visitó recientemente Ecuador invitado por el candidato a la presidencia, el banquero Guillermo Lasso, director de la fundación “Ecuador libre”.

Agencia Andes

Durante una conferencia de prensa en la ciudad de Guayaquil, el visitante fue crítico respecto a las políticas económicas y sociales del país. Entre otros temas dijo que el Estado ha fracasado al no generar empleos y registrar un índice de subempleo del 60%. Además de cuestionar la ideología del gobierno, y su adhesión al Socialismo del Siglo XXI, Piñera criticó las deficiencias de salud y seguridad social de Ecuador a las que llamó deficientes.

La respuesta no se hizo esperar. El secretario de la Administración Pública de Ecuador, Pedro Solines, tildó a Piñera de desubicado por querer criticar a los gobiernos progresistas.

“Resulta un contrasentido, más aun cuando sus políticas de derecha y neoliberales fracasaron en el país hermano… Y más reprochable es que la oposición, en su desesperación por su pérdida de espacio ante las próximas elecciones, haga eco a estos falsos líderes”, escribió en Twitter.

Llamó a no dejarse engañar y recordó los reclamos de los chilenos por las políticas de privatización de la educación en Chile.

El ministro de Trabajo, Leonardo Berrezueta, escribió en Twitter: «@sebastianpinera gracias x preocuparse x empleo de nuestro país. Desde hace 10 años nos ocupamos d mejorar condiciones q dejó su amigo Lasso».

El exmandatario chileno criticó a los gobiernos que siguen los preceptos del Socialismo del Siglo XXI, tendencia a la que él considera fracasada. “Creo que la doctrina de los países del ALBA no permite avanzar en la dirección correcta. Es la libertad, la equidad, el progreso lo que hace grande a los países”. En la administración Piñera se evidenció una profundización de las lógicas de libre mercado que los anteriores gobiernos habían preservado. No fue un período de reformas estructurales para hacer el modelo económico más equitativo, menos desigual y más balanceado en distintos aspectos.

Piñera criticó las deficiencias de salud y seguridad social en Ecuador a las que llamó “insuficientes”.

No obstante, el actual sistema de pensiones en Chile, manejado por Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), son rechazadas por la población por pagar bajísimas jubilaciones. Las AFP fueron creadas durante la dictadura de Augusto Pinochet cuando José Piñera, hermano de Sebastián, se desempeñaba como ministro de Trabajo. El sistema de pensiones opera como una cuenta de ahorro forzoso, en la que los empleados aportan a las AFP el 10% de sus sueldos y al final de su vida laboral reciben jubilaciones que acusan son muy menores a las remuneraciones que percibían.

Las AFP administran 150.685 millones de dólares que aportan los trabajadores para sus jubilaciones y que estas empresas invierten en acciones o renta fija, cuyas pérdidas son asumidas por los cotizantes, quienes ven reducidas sus pensiones, lo que en muchos casos los obliga a seguir trabajando después de haberse jubilado.

Protestas estudiantiles

El movimiento estudiantil protagonozó las movilizaciones más grandes registradas en la historia de Chile, con paros, tomas y marchas que en Santiago convocaron más de cien mil personas en la Alameda. Las políticas del gobierno de Piñera no estuvieron en sintonía con las peticiones de los estudiantes ya que no se abrió, por ejemplo, a terminar con el lucro, a fortalecer la educación pública y avanzar en gratuidad en la educación superior.

Empleo

Sobre el empleo, Piñera manifestó que en Ecuador no hay nada de qué alegrarse: “El hecho que en Ecuador el 60 % de los trabajos sea informal en el fondo es un fracaso del Estado que no ha sido capaz de crear las condiciones para que ese 60 % de los trabajadores se incorpore a la economía formal”, añadió.

Su contertulio, Guillermo Lasso presentó como logro de Piñera la creación de un millón de empleo, una de las promesas de campaña del chileno.

Sin embargo, de los 985.000 empleos que informa el INE (Instituto Nacional de Estadísticas de Chile), 335.000 corresponden a empresas de 1 a 5 trabajadores formales e informales, es decir empleos sumamente precarios. Entre ellos se incluye a 25.000 empleadores, 30.000 familiares no remunerados de los empleadores, muchos sin contrato, muchos sin leyes sociales, la gran mayoría en valores cercanos al mínimo legal y muy poco estables (las empresas más pequeñas tienen altos índices de fracaso), 48.000 corresponden a empresas de 5 a 10 trabajadores, 55.000 a empresas de 11 a 49 trabajadores, 169.000 a empresas de 50 a 199 trabajadores y 378.000 a empresas sobre 200 trabajadores.

«No afectar la honra de las personas»

En Guayaquil, Piñera condenó la supuesta persecución contra Lasso en relación al llamado a tribunales que enfrentará esta semana por sus declaraciones sobre el titular de la Secretaría de Ciencia y Tecnología (Senescyt), René Ramírez, y su esposa. Aclaró que no le gusta referirse a política interna, pero cuestionó si es justo o no es justo que alguien que defiende la educación deba ser procesado.

No obstante, la demanda de Ramírez contra Lasso no tiene nada que ver el tema de la educación. El exbanquero acusó a la esposa del titular de la Senescyt de cobrar doble sueldo, lo cual fue desmentido por la parte afectada. Esta semana, Guillermo Lasso arguyó que lo que él hizo fue replicar una información divulgada por el sitio web de noticias “Mil Hojas”, caracterizada por sus publicaciones contra el Gobierno.

Pese  a su enunciado en junio de 2016 Piñera indicó que «la prensa tiene que ser cuidadosa en no afectar la honra de personas cuando no corresponde».