La analista jurídica, Beatriz Rodríguez, calificó como «una cortina de humo» a los allanamientos realizados a las oficinas del Metro de Quito en el marco del caso Odebrecht. De acuerdo con su punto de vista, se quiere desviar la atención de la ciudadanía para «posiblemente encubrir otras vinculaciones a funcionarios del Gobierno». Sostuvo que con una indemnización y disculpas de la empresa brasileña no se resarce la dignidad de los ecuatorianos.
Rodríguez aseveró que no se puede realizar un allanamiento solo con una denuncia, pues deben existir pruebas. Para la analista no existe legitimidad en los procesos de investigación que se llevan a cabo en este caso porque no hay elementos y en otros que sí los hay -a su parecer- no se hace nada.
En este sentido, citó el caso de Ricardo Rivera, tío del vicepresidente Jorge Glas. «Hay que entender que una persona que recibe coimas sin ser funcionario es porque tuvo nexos con alguien del aparataje estatal. Aquí hubo testaferros», argumentó.
La abogada penalista consideró que es primordial que la constructora salga inmediatamente del país, pero que antes debe responder por corromper a los funcionarios.
