Esto lo dio a conocer una fuente de la Cancillería a diario EL COMERCIO, siete días después de que la Asamblea Nacional autorizara al Gobierno la denuncia del tratado constitutivo del bloque, que fue suscrito en 2008 por el Gobierno de Rafael Correa.
Como parte de ese proceso de devolución en estos días, la administración de Unasur empezará a empacar muebles, cuadros, archivos, libros, entre otros, que irán a una bodega hasta decidir si van a otro país dispuesto a acoger a la sede o se restituye a los donantes.
La fuente aclaró que la Cancillería no ha dispuesto que sea retirada la estatua del expresidente de Argentina, Néstor Kirchner, que se ubicaba junto al edificio sede. Pero sostuvo que esta es una potestad que tiene la administradora de Unasur.
La estatua está avaluada por USD 114,000 fue donado por el gobierno de Argentina, presidido en el 2014 por Cristina Fernández de Kirchner.
Tengo entendido que eso lo van a poner en un cajón y lo van a poner en una bodega porque es propiedad de Unasur hasta que los países que están allí resuelvan la disolución del organismo”, expresó.
Tras la autorización de la Asamblea, el presidente de la República, Lenín Moreno, deberá firmar un Decreto Ejecutivo para denunciar el tratado de Unasur, lo que surtirá efecto seis meses después, según las cláusulas.
La notificación será enviada a los países que todavía siguen en Unasur: Venezuela, Uruguay, Bolivia, Guayana y Surinam. El edificio está avaluado en unos USD 40 millones. Miguel Gerónimo Villalba es el escultor que realizó la estatua de Kitchner. Esta se elaboró en Buenos Aires.
#UNASUR
Estoy en el edificio de UNASUR.
En efecto, ya no está la estatua del expresidente argentino Néstor Kirchner.
Nadie confirma dónde está la figura. @EcuavisaInforma pic.twitter.com/S0uIn7wpr8— Juan Carlos Aizprúa (@jcarlosaizprua) September 26, 2019
El busto fue develada en una ceremonia realizada el 3 de diciembre del 2014 a la que asistieron los entonces presidentes Rafael Correa (Ecuador), Dilma Rousseff (Brasil), Cristina Fernández (Argentina), José Mujica (Uruguay), Evo Morales (Bolivia)y Nicolás Maduro (Venezuela,).
El autor, en 2014 le dijo a diario La Nación de Buenos Aires: “Lo realicé en movimiento, como avanzando. Intenté transmitir ese concepto. Quise recordar el día en el que fue a la Esma (colegio militar) y pidió bajar los cuadros (de los dictadores Jorge Videla y Reynaldo Bignone). De allí el gesto de levantar la mano”.
Fuente: El Comercio – Nota Original: LINK