Juan Pablo Pozo, presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), acudió a la Fiscalía General del Estado (FGE) para solicitar formalmente se investiguen las denuncias de supuestas irregularidades de votos de ecuatorianos que viven en el exterior. Pozo consideró a los cuestionamientos como infundados.

El Ciudadano

Las denuncias provienen de la organización denominada Alianza Nacional por la Transparencia Electoral, compuesta por opositores al Gobierno. Ellos dicen que en el 2014 supuestamente votaron el 92% de migrantes “en elecciones seccionales en las que no podían votar”.

Pozo desestimó estas denuncias ya que la prueba de haber votado es el padrón electoral y no los certificados. La razón es que en el padrón pudieran estar registrados, pero no votaron y queda certificado con un sello.

Pozo aseguró que este tipo de denuncias son una estrategia para menoscabar el proceso electoral del 2017. Así por ejemplo, Sociedad Patriótica aseguró que se hizo votar a fallecidos, no obstante el CNE encontró a las personas señaladas y desmitieron al partido político.

La próxima semana el CNE recibirá formalmente la Certificación Internacional ISO Electoral otorgada por la Organización de Estados Americanos (OEA), la cual avala sus procesos y manejo administrativo. Ecuador es el segundo país en el continente en obtener ese aval.