En medio de las quejas de los electores, las puertas de la Unidad Educativa Domingo Comín fueron abiertas a los ciudadanos a las 07:30 de este domingo.
De acuerdo a los agentes de policía que custodiaban la entrada al recinto electoral, la demora se debió a la conformación de las juntas receptoras del voto; sin embargo, los representantes de las coordinaciones de mesa prefirieron no dar detalles del retraso.
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A pesar de la lluvia y la presencia de electores en los exteriores de dos colegios, el tráfico circuló con normalidad, a diferencia de elecciones anteriores.
En medio de una moderada lluvia, los miembros de las Juntas Receptoras del Voto (JRV) del Amarilles recién a las 07:10 armaban los biombos donde se depositarían los votos; en otras mesas en cambio estaban a la espera de completar los integrantes.
Pese a la lluvia, en las afueras de las aulas varios votantes llegaron puntuales y reclamaban por la falta de celeridad en el inicio de las elecciones. «Apuren que hay que trabajar», decían algunos electores.
En el colegio Aurora Estrada, en cambio para las 08:10, la mayoría de mesas estaban recibiendo a los votantes con normalidad. En menos de cinco minutos ejercían su voto, recibían su certificado de votación y se retiraban del lugar. Zoila Zambrano, de 79 años, fue una de las primeras votantes. «Vengo a votar por la Patria, ¡arriba Ecuador!», exclamó la adulta mayor.
En la Junta 338, miembros del Consejo Nacional Electoral aguardaban la llegada de votantes para completar la mesa. Algunos de los electores que habían llegado se resistían a integrarlas, dijeron miembros de la Marina que resguardan la seguridad del proceso.
Fuente: El Universo
