Los nueve allanamientos que ejecutó la Fiscalía en Guayaquil y Quito, dentro de la investigación sobre una presunta red de corrupción en las empresas públicas, llevó a que el ministro Francisco Jiménez reafirme la postura del Gobierno de “cero tolerancia a la corrupción”.

SANTIAGO BASABE
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Mediante una rueda de prensa, las autoridades no solo insistieron en que en el Gobierno no forma parte de un entramado de corrupción sino que rechazaron que existan candidatos del oficialismo que estén vinculados con el narcotráfico. En Notimundo Estelar, Santiago Basabe, docente de la Flacso y analista político, aseguró que estas reacciones son tardías y demuestran la debilidad de la actual administración.

Para Basabe, este escenario podría tornarse más grave si en el proceso de investigación, la Fiscalía establece más pruebas y conjeturas que puedan “terminar afectando al Gobierno de formas más significativa”. Esto, en el sentido en el que podría representar una pérdida importante de respaldo a la consulta popular y, peor aún, desatar nuevas manifestaciones en contra del presidente Lasso, como las registradas en junio de 2021.

“Estas denuncias pueden materializarse y servir para que se desate un proceso de inestabilidad en el país”, enfatizó Basabe.

Agregó que las siguientes semanas son importantes y determinantes para que se esclarezca este caso y precisó que la Fiscalía debería ser el ente que dé las primeras decisiones para reafirmar o desmentir estas acusaciones que surgieron de un medio de comunicación digital.

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