Los incidentes registrados este miércoles tras terminar el partido por Copa Sudamerica entre Emelec y La Guaira podrían dejarle un perjuicio económico al Bombillo o, en el mejor de los casos, un llamado de atención.

El Telégrafo

Esto porque, luego del pitazo final y pese a que quedaron eliminados, la euforia de los hinchas por el estreno del remodelado estadio Capwell los llevó a invadir el campo de juego, cuando los jugadores todavía no abandonaban la cancha.

Aunque no se registraron incidentes violentos, ni heridos, el reglamento no permite este tipo de conductas con el fin de salvaguardar la integridad de jugadores e hinchas.

Según el artículo 22 del reglamento, este tipo de actos se pueden sancionar con:

1.     Advertencia.

2.     Amonestación.

3.     Multa económica no menor a USD 100 ni superior a USD 400.000.

4.     Obligación de jugar un partido a puerta cerrada.

5.     Obligación de jugar un partido en un tercer país.

6.     Cierre total o parcial del estadio.

7.     Prohibición de jugar un partido en un estadio determinado.

8.     Descalificación de competiciones en curso y/o futuras competiciones.

9.     Prohibición de venta y/o compra de boletos.

El hecho se dio porque aún no se colocan los vidrios templados que reemplazarán a las antiguas mallas de seguridad y en su lugar se ubicaron vallas metálicas. Los miembros de la Policía Nacional no pudieron contener a los fanáticos que finalmente saltaron a la cancha para tomarse fotografías y tener impresiones más cercanas del nuevo recinto deportivo.

De cualquier modo, Emelec podría apelar a cualquier resolución que tome la Conmebol y pedir que se aplaque la sanción por ser primera vez y tratarse de un incidente no violento.