Los equipos de rescate empezaban a organizarse este jueves (7 de septiembre del 2017) en las islas del Caribe devastadas por Irma, un huracán de una violencia inédita que dejó al menos nueve muertos y que ahora avanza hacia República Dominicana.
El poderoso huracán de categoría 5, la más alta, dejó al menos ocho muertos y 21 heridos tras su paso por la isla franco-holandesa de San Martín, anunciaron los servicios de socorro franceses en un balance provisional. En Barbuda, que forma un estado junto a la isla de Antigua -que se libró de la tormenta- Irma dejó un muerto y causó una “devastación total”, dijo el primer ministro Gaston Browne.
En la parte holandesa de San Martín, los daños eran “enormes”, sobre todo en el aeropuerto y el puerto. La isla quedó “cortada del mundo”, señaló el primer ministro holandés Mark Rutte.
Daniel Gibbs, presidente de la parte francesa de San Martín, donde viven 70 000 personas, dijo a una radio local que “el 95% de la isla quedó destruida”. Los testigos hablan de un “paisaje apocalíptico”. “Estábamos frente a un fenómeno de una fuerza sin precedente”, afirmó el periodista local Steve Prudent.