La Embajada ecuatoriana en Washington cumplió tres meses sin un titular. Precisamente, a puertas de que expire -el 31 de diciembre de 2017- el Sistema General de Preferencias Arancelarias (SGP), que mantiene EE.UU. con más de 120 países.

Agencia Andes

El pasado 17 de agosto, el presidente Lenín Moreno agradeció los servicios del embajador Francisco Borja. En ese entonces, el Ejecutivo aún esperaba una respuesta del Gobierno estadounidense sobre la postulación para el cargo del exsecretario Jurídico, Alexis Mera.

El puesto sigue vacante y se desconoce quiénes son los candidatos para ocuparlo. Antes de partir a Europa, el 7 de noviembre, la canciller María Fernanda Espinosa repitió que “la decisión final la tendrá que tomar el Presidente”.

Insistió otra vez en que está presentándole opciones, pero no solo para Washington sino para otros países donde los embajadores cumplieron con su tiempo. De momento, en la sede diplomática trabajan 15 personas, según el distributivo de personal de la Cancillería. Y el ministro Andrés Montalvo, subjefe de misión, está a cargo.

No obstante, en diplomacia la interacción siempre se lleva a cabo entre funcionarios del mismo nivel. El Embajador es el representante personal del Jefe de Estado, por lo que tiene acceso a los altos niveles de autoridades del Ejecutivo y Legislativo, como el Secretario de Estado de EE.UU. Este acceso, por ejemplo, no lo tiene un agregado de Negocios.

A esto se suma que la sede de la Embajada sufrió un incendio el 27 de septiembre, por lo que la oficina tuvo que trasladarse “a un local temporal, que presenta restricciones de espacio y, por su ubicación, no es permitido recibir la afluencia de personas”, informa el mensaje en la línea telefónica de la sede.

Fuente: El Comercio