Los cadetes que van a la escuela de oficiales se escogen de los puntajes más altos de los postulantes aceptados.

Más de 164.499 jóvenes aplicaron desde 2013 hasta junio de 2015 para ingresar a la Policía, de los cuales fueron aceptados 8.827, quienes accedieron luego de rigurosas pruebas diseñadas para identificar en los postulantes las características que necesitan del servidor policial enfocados al trabajo de seguridad con la comunidad.

“Todas las pruebas previas se enfocan en identificar a quienes tienen la vocación de servicio, ya que muchos se inscriben únicamente por la seguridad de tener un empleo fijo”, manifestó Isolde Morales, directora de la Comisión de reclutamiento del Ministerio del Interior.

Incluso desde 2015 los candidatos para ingresar a la escuela de oficiales se escogen de los puntajes más altos de todos los aspirantes que se inscriben para el proceso, “de esta manera aseguramos las mismas oportunidades a todos los postulantes”, indicó.

La funcionaria explicó que esa modalidad fue adoptada por la Comisión de Admisión, tomando en cuenta que quienes ingresen en calidad de cadetes en la Escuela Superior deberán someterse a una exhaustiva formación personal, física y académica.

Existen varios aspectos por considerar con respecto al puntaje, por ejemplo los postulantes deben obtener mínimo 700 puntos  en la prueba de educación superior (Senescyt), además de las  propias que elabora la Unidad de Reclutamiento  con la Dirección Nacional de Educación.