El Gobierno anunció el pasado lunes 23 de marzo, en cadena nacional, que se acogerá al periodo de gracia de 30 días para no pagar los interese previstos de la deuda en este mes, pero sí cancelará hoy los USD 325 millones de capital de los bonos 2020.
Las decisiones ayudarán, además, a que no se cierren las opciones de financiamiento para el país y, de esta manera, ingresen al país USD 2 mil millones en préstamos en las siguientes semanas.
De ese monto, USD 500 millones provendrán del Fondo Monetario Internacional (FMI), otros USD 500 millones de multilaterales como el BID, Banco Mundial y CAF; y, el resto, vendrán de deuda bilateral con China, de libre disponibilidad y que no está atada a la ejecución de proyectos.
Además, el Ministro dijo que va a “iniciar diálogos con acreedores comerciales, bilaterales y multilaterales para lograr un buen arreglo para el país y que permita disminuir la presión a lo largo del año (de la deuda) y tener, por el otro lado, acceso a financiamiento”.
El Gobierno anunció que las medidas persiguen cuatro prioridades y son garantizar la salud, la alimentación, la productividad y la dolarización.
Los bonos son papeles que el Gobierno vende a inversionistas a cambio de un préstamo de dinero y, a cambio, debe pagar semestralmente un interés por un período determinado (cupones).
Al final de ese período debe cubrir el monto completo del préstamo o capital. El Fisco debe atender estas obligaciones en medio de la emergencia sanitaria por el covid-19 que vive el país y de un escenario de bajos ingresos.
El FMI informó ayer que Ecuador ha solicitado un préstamo dentro de la línea de financiamiento rápido, aunque no mencionó el monto.
El organismo dijo que responderá de forma expedita este pedido. Además, anunció que “paralelamente el personal está trabajando de inmediato con las autoridades en un nuevo acuerdo” que se basa en el marco de servicio ampliado actual (SAF) con el objetivo de reforzar el desempeño económico del Ecuador, fortalecer las bases de la dolarización y brindar beneficios a la población, especialmente la más vulnerable.
“El objetivo es proporcionar alivio inmediato a Ecuador para abordar los efectos de una creciente crisis de salud”, dijo Kristalina Georgieva, directora del Fondo.
El país debe pagar solo USD 325 millones de los bonos 2020 gracias a que en junio del año pasado, antes de que se cumpla el plazo, el Gobierno decidió recomprar parte de esos bonos 2020, emitiendo nuevos bonos en mejores condiciones y aprovechando que en los mercados había una mejor percepción de la economía del país.
De no haber hecho esa operación se habrían tenido que pagar USD 1 500 millones. Ecuador cumplirá por segunda vez en la historia republicana con el pago de este tipo de deuda por completo (cupones y capital).
La Asamblea instó el domingo pasado al Ejecutivo a que no pague “la deuda externa” y use los recursos para atender la emergencia de salud por el virus.
El Legislativo planteó renegociar estas obligaciones luego de la emergencia e invitó a otros países de la región a tomar la medida.
Entre los inversionistas hubo incertidumbre luego del pedido de la Asamblea. Los precios de los bonos ecuatorianos se desplomaron ayer y se negociaron a montos menores al 40% de su valor.
Esas cifras reflejaron el nerviosismo del mercado internacional, que dudaba ayer de que el pago del tramo de deuda previsto se concrete hoy, dijo Santiago Mosquera, director de USFQ Business School.
Mosquera explicó que, actualmente, el país no puede buscar financiamiento emitiendo bonos porque es considerado un país muy riesgoso y los inversionistas están buscando instrumentos seguros, como los bonos del tesoro de EE.UU. o el oro, por la incertidumbre que ha generado el covid-19.
Fuente: El Comercio- Nota Original: LINK