Los últimos 8 días de diciembre constituyen el principal blanco de la industria del marketing y la mayor esperanza del sector comercial en el año. Las festividades de Navidad y fin de año generan un significativo gasto en los hogares.
El decimotercero, que reciben en diciembre los trabajadores formales del país, constituye un importante flujo de capital a la economía que permite incrementar el nivel de consumo. Se estima que entre los sectores público y privado destinaron $ 1.500 millones al pago del decimotercero de este mes. En 2012 el sector privado canceló $ 626 millones por esta remuneración extra y el público, $ 451 millones.
Si bien es cierto que diciembre es un mes donde la economía aumenta su dinamismo, producto de la época navideña y donde los individuos propician el consumo, debido a la coyuntura que el país atraviesa durante este año, el consumo se verá afectado y posiblemente muestre resultados constantes o decrecientes en comparación con años anteriores, según la Encuesta Anual de Navidad 2015 realizada por la firma de profesionales Deloitte.
Esto se puede reflejar en los indicadores del índice de confianza empresarial publicado por el Banco Central del Ecuador (BCE), que abarca 1.000 grandes empresas de las ramas de la actividad económica del país y en donde en el mes de septiembre de este año el sector del comercio muestra un porcentaje de 4,5% por debajo de la línea de tendencia de crecimiento de corto plazo. A su vez, el porcentaje de ventas muestra una variación negativa de 1,6% con respecto al mes anterior.
Sin embargo, por la época el comportamiento de los individuos tenderá al consumo, por lo cual se prevé que las personas piensen en primera instancia en el factor precio a la hora de comprar, buscando bienes más baratos o sustitutos que cumplan con las necesidades.
Las personas buscarán la mejor opción de acuerdo a su capacidad adquisitiva. Entre los bienes que más se comercializan en diciembre son tecnológicos, vestimenta, alimentación, licores, juguetes y electrodomésticos. En lo que se refiere a productos tecnológicos, las personas buscarán bienes más baratos, es decir, los individuos prefieren comprar por internet en lugar de acercarse a las tiendas de distribución.
En el caso de alimentación, licores, vestimenta y juguetes, las personas escogerán los productos de acuerdo a sus necesidades y buscarán la mejor opción con bienes similares, pero que estén a bajo precio.
Por su parte, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), en una publicación especial por Navidad y basada en cifras de 2012, señaló que este mes en los hogares ecuatorianos el gasto promedio es de $ 4’000.000 en galletas, $ 1’000.000 en caramelos, $ 95.000 en pavos, $ 2.000 en frutas secas y $ 5’000.000 en chocolate y dulces, exclusivamente para esta época. El monto solo corresponde a gasto monetario del hogar y no a regalos o donaciones, etc.
Para el financiamiento de estos bienes se espera que haya un crecimiento del endeudamiento por medio del uso de las tarjetas de crédito, como se observa en el último boletín estadístico publicado por el Banco Central del Ecuador. En este se revela un incremento del 16,3% en septiembre de este año con respecto al mismo mes de 2014.
En el último mes del año la facturación con tarjetas de crédito aumenta considerablemente con respecto al resto del año. La facturación con tarjetas de crédito en diciembre de 2014 fue de $ 714’459.925, un 35,7% más que en noviembre del mismo año ($ 526’445.235), de acuerdo a las estadísticas de la Superintendencia de Bancos del Ecuador. Pese a que existe mayor circulante en los bolsillos de los ecuatorianos en diciembre, los tarjetahabientes prefieren pagar valores mínimos (crédito rotativo) en sus cuotas que hacerlas con cuotas fijas mensuales (crédito diferido).
En muchos casos el crédito rotativo genera sobreendeudamiento en las personas. En el primer semestre de este año se realizaron 35’019.603 transacciones a través de crédito rotativo ($ 1.865’839.803) y 5’952.340 con diferido ($ 1.334’680.160).
Este mes también se incrementa la movilización de las personas para reunirse con sus familias. En los feriados de Navidad y fin de año se estima que los viajeros gastaron $ 120,8 millones, según la Coordinación General de Estadística e Investigación del Ministerio de Turismo. Alrededor de 1’711.585 viajes al interior del país se registraron durante los 8 días de descanso.