La comisión legislativa que vigila el cumplimiento de las obligaciones del Estado con los jubilados recibió este viernes 20 de julio a varios ministros, para conocer los avances para el pago pendiente a 37 mil exservidores públicos.

El Telégrafo

En la sesión, el ministro Oswaldo Jarrín dijo que la cartera de Defensa ha cancelado a 932 personas por concepto de jubilación, con un presupuesto de más de $ 50 millones. Otras 357 personas se encuentran pendientes de la priorización por parte del Ministerio de Trabajo y del pago por acogerse al retiro por jubilación, añadió.

Rubén Flores, titular del Ministerio de Agricultura, señaló que se han enviado 119 expedientes por jubilación al Ministerio de Trabajo. «Al momento, 54 personas ya recibieron la compensación por jubilación», acotó. José Augusto Briones, titular de Senplades, detalló que los ministerios establecen el listado de las personas que van a ser susceptibles de la jubilación; el Ministerio de Trabajo valida los requisitos y consolida los datos; y la Secretaría de Planificación analiza la información y emite el dictamen de prioridad correspondiente.

Richard Martínez, ministro de Finanzas, recalcó que para el Gobierno los jubilados son una prioridad. «En el último año se ha pagado una buena parte de la deuda que acarreaba el gobierno anterior», dijo al referirse a $ 244,1 millones cancelados.

Pidió comprensión y aseguró que, a pesar de la «situación extremadamente difícil en la caja fiscal», se está haciendo todo lo posible para cumplir con el pago. Martínez informó que el Ministerio de Finanzas cuenta con $ 90 millones para cumplir con el pago de las jubilaciones obligatorias pendientes, que no estaban contempladas en el presupuesto de este año.

Este monto será cancelado en un cronograma que contempla transferencias de $ 15 millones mensuales hasta fines de este 2018. Anunció que Finanzas trabaja con Senplades y el Ministerio de Trabajo en los cronogramas de pago, que estarían definidos en unos 15 días y empezar a cancelar deudas pendientes a los jubilados del país.

Fuente: El Telégrafo