Los coordinadores de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac) entregaron ayer la posta a los cancilleres. Desde el domingo estaban reunidos para elaborar el documento que será aprobado por los jefes de Estado mañana.
Cada país lleva su propia agenda, pero paulatinamente se ha colado el asunto de la crisis económica internacional. El canciller Ricardo Patiño confirmó que la caída de precios de las materias primas será discutida por los presidentes. “Se pasará revista a los temas que más preocupan a la región y la economía será uno de los principales puntos”.
Cuando Ecuador asumió la presidencia pro témpore del organismo, el año pasado logró que la Celac se comprometiera a eliminar la pobreza extrema para 2020. Por eso el planteamiento ahora es que las dificultades económicas no afecten esa agenda. “También se va a tratar, independientemente de la economía porque hay países que están en recesión y otros que han disminuido su crecimiento, la pobreza, la indigencia”, explicó el ministro de Relaciones Exteriores ecuatoriano.
Patiño reconoció que las turbulencias económicas afectan la integración regional porque los presidentes están concentrados en los asuntos internos, en desmedro de los temas internacionales. “A pesar de las limitaciones económicas por la caída de los precios internacionales siempre es posible crecer y generar bienestar, estamos concentrados en eso, es nuestra mayor preocupación”.
Los presidentes abordarán la crisis económica en el retiro que tendrán la mañana del miércoles. En la tarde será la plenaria con los discursos de rigor y acceso a la prensa. Las turbulencias financieras probablemente consten en la resolución final pero aún se desconoce cómo será tratado el problema.
De igual manera cada país ha expresado su interés en algún punto en particular. Colombia, por ejemplo, ha expresado su intención de que su proceso de paz sea tratado. Bogotá aspira a que la Celac encuentre algún mecanismo para acompañar el abandono de las armas de la guerrilla de las FARC.
Haití, en cambio, desea que su crisis electoral se analice en el foro. El pasado domingo debía efectuarse la segunda vuelta presidencial pero fue suspendida por la autoridad electoral debido a la falta de seguridad. A partir de allí se desataron protestas en Puerto Príncipe.
Patiño indicó que los haitianos “quieren que apoyemos la democracia, sin intervención. Podemos políticamente acompañar y en algunos casos solucionar”. El presidente de Haití, Michel Martelly, ha confirmado su presencia en el encuentro de Quito.
A la par de la cumbre de la Celac habrá una agenda paralelamente. Para Ecuador lo más importante será la visita de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff. Ella se reunirá con Rafael Correa en Carondelet la tarde y noche de hoy.
Ambos líderes conversarán sobre las relaciones bilaterales y proyectos de desarrollo. Un punto específico será el corredor Manta-Manaos, que abriría al norte brasileño una puerta al Pacífico. Brasil está en recesión por lo que el eje permitiría la reactivación económica.
En el plano internacional, en la agenda aparece la democratización de los organismos multilaterales y la reforma de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Además, luego del encuentro de la Celac habrá una reunión de cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) para estudiar cuánto ha avanzado este bloque.
Ayer se supo que el presidente de Argentina, Mauricio Macri, suspendió su asistencia a la cumbre por recomendación médica debido a una lesión y al “esfuerzo físico” de su viaje a Davos, donde participó en el Foro Económico Mundial.
La vicepresidenta Gabriela Michetti lo reemplazará. La cita iba a ser la primera vez en que Macri se topara con su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, a quien critica por supuestas violaciones a los derechos humanos.