Obras que terminarán costando más del doble de lo presupuestado. El gobierno contó ayer los detalles de los problemas que encontró en 640 construcciones que heredó de la administración del expresidente Rafael Correa. Algunas, con trabajos complementarios que superan el 600 % del valor original.
El precio, sin embargo, es apenas uno de los problemas que encontraron las autoridades en estas obras que no han podido entrar en funcionamiento, aunque el 92 % de ellas debían estar concluidas hasta marzo de este año. Ese es el caso, por ejemplo, del Hospital Monte Sinaí de Guayaquil.
Jorge Wated, director del Servicio de Contratación de Obras (Secob), aseguró que la construcción de esta casa de salud, que empezó en 2013, está paralizada por falta de planificación, pese a que presenta un avance de obras del 87 %.
La construcción del hospital, que se proyectaba como una solución a la brecha de camas hospitalarias en la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón), ha tenido que ir superando problemas básicos como la falta de agua potable y luz.
“Sin embargo, todavía tiene problemas con los permisos que deben dar los bomberos y el propio Municipio de Guayaquil, con el que tendremos que sentarnos para resolver esto lo antes posible”, manifestó.
Y como si no fuera suficiente con eso, parte de la edificación está levantada sobre un terreno que no pasó por un proceso de expropiación. Es decir, aún no pertenece al gobierno central, lo que dificulta avanzar en las otras soluciones.
Al gobierno del presidente Lenín Moreno le tomó cinco meses detectar estas dificultades. Aunque las primeras alertas saltaron a la vista cuando los ministerios empezaron a recibir y analizar los contratos de las obras que estaban en marcha. El 14 de julio, por ejemplo, EXPRESO publicó el reportaje ‘La herencia en obras tiene varios pendientes’, que recogía algunas inquietudes.